Desde tus primeras consultas para el control del embarazo, tu ginecólogo te dio una fecha probable de parto. Así que alrededor de un mes antes de esta fecha tu cuerpo empieza a prepararse y se presentan varios síntomas. Pero es importante reconocer las verdaderas señales inminentes de que estás en el comienzo de trabajo de parto.
Ya que no existe una manera para predecir con exactitud el inicio del nacimiento de tu bebé, puedes estar atenta a algunos síntomas. Pero también debes saber que aún cuando identifiques las señales más conocidas del comienzo de parto, el alumbramiento puede tardar días.
Señales y Síntomas
Conforme se aproxima la fecha indicada se presentan síntomas nuevos con los que te das cuenta que tu cuerpo está preparándose.
1. Cuando el cuello del útero se empieza a dilatar puedes expulsar el Tapón Mucoso. Este tapón es una pequeña cantidad de flujo espeso que tiene como finalidad mantener sellado el cuello del útero. El tapón puede salir de una sola vez, o a largo de varios días en forma de un flujo vaginal intenso. Lo que caracteriza a este flujo es el color marrón, rosado o rojo, al estar teñido de sangre.
2. Se presentan contracciones que van aumentando en intensidad y frecuencia. Las diferenciarás de las contracciones de Braxton Hicks al ser más prolongadas y periódicas, ya que ayudan a que el cuello uterino se dilate. Cada contracción empieza a sentirse en la parte inferior de la espalda y se extiende al abdomen.
3. Otro de los síntomas más evidentes del comienzo de trabajo de parto, aunque uno muy raro, es romper la fuente de aguas. Este proceso se refiere a la rotura del saco amniótico, que está lleno del líquido que cubre al bebé. El fluido se elimina por la vagina en grandes cantidades, o solo de a un poco cuando sólo es una rasgadura en el saco. No es muy frecuente y lo normal es que se presente en el trabajo de parto, en la fase activa o avanzada.
Además de estos tres síntomas se pueden presentar algunas de las siguientes señales:
• El abdomen se ve más protuberante y más abajo.
• Tener la sensación de abdomen duro o tenso.
• Tener dolor de espalda e incomodidad en la cadera, sobre todo al caminar.
• Ganas de orinar con más frecuencia.
• Tener la sensación de respirar y digerir mejor debido a que el bebé está descendiendo.
• Unas 48 horas antes del trabajo de parto se presentan evacuaciones frecuentes que limpian el intestino.
• Tener síntomas parecidos a la gripe pero sin fiebre, también puede presentarse indigestión y náuseas.
• Aumento de la presión sobre el pubis ya que el bebé se va encajando en la pelvis.
En conclusión…
Todos estos signos que te presento son los que más frecuentemente advierten que se acerca el trabajo de parto. Aunque también hay mujeres que no llegan a sentir nada diferente antes del alumbramiento. Por eso es importante que si estás en las últimas semanas de tu embarazo pongas atención a cualquier novedad que se presente.
Recuerda que cada mujer es diferente y no todas llevan el mismo proceso en el trabajo de parto. Por lo tanto es recomendable que estés en contacto con tu doctor, el te indicará en qué momento acudir al hospital.