Higiene íntima y pH Vaginal

Higiene íntima y pH Vaginal

  • Higiene íntima femenina

En la vida de la mujer, durante sus diferentes etapas, es necesario realizar una higiene determinada para mantener sana la zona genital. Por lo que la higiene íntima es necesaria desde la infancia y se inculque el aprendizaje de la práctica adecuada, de las diferentes partes del cuerpo, especialmente de  una zona tan vulnerable en cuanto a la higiene como es la región genital

La vagina es el órgano femenino que se extiende desde el cuello del útero hasta la región genital externa. Es el órgano femenino que actúa durante el coito y es el túnel por el que pasa el bebé al momento del parto. Además, la vagina es el trayecto que recorrerá el producto de la menstruación. También es responsable de la secreción de un flujo que será variable en su composición a lo largo de la vida de la mujer, dependiendo de la fase del ciclo en la que se encuentre y dependiendo de la edad de la mujer, llegando incluso a su casi desaparición cuando se llega a edades de menopausia.

En la composición del flujo, encontramos agua, electrólitos, fosfatos, glucosa, mucopolisacáridos, secreciones glandulares, elementos celulares (de descamación e integrantes de la sangre) y productos de desecho. Pero algo realmente importante es el grado de acidez vaginal (pH vaginal), que mantiene la normalidad del ecosistema y que es dependiente de los conocidos bacilos de Döderlein, que consiguen fisiológicamente la descomposición del glucógeno en moléculas de ácido láctico, teniendo como resultado un pH ácido entre 3.8 y 4.2, que permite defender el ecosistema de gérmenes patógenos.
Sin embargo, el pH vaginal puede acidificarse o alcalinizarse según actúen diferentes circunstancias: las relaciones sexuales, la aparición menstrual, el momento ovulatorio o la interacción de los productos anticonceptivos. Es por esto que el mantenimiento de un pH adecuado es necesario para el mantenimiento de la salud en esta área genital.

¿Cómo puedo conocer mi pH vaginal?

El pH se puede medir con tiras de papel de tornasol o, de un modo más sofisticado, con electrodos de medida de pH, que proporcionan datos decimales. Aunque lo ideal sería que en toda exploración ginecológica se llevara a cabo un protocolo del pH vaginal (medición y corrección si fuera necesario).

¿Cómo podemos actuar sobre el pH vaginal?

Una vez conocido el valor del pH, y si es preciso corregirlo, se actuará aumentando el grado de acidez (disminuyendo el pH), o bien, disminuyendo el grado de acidez (aumentando el pH).

En general, elevan el pH vaginal por encima de 5.0 (es decir, disminuyen el grado de acidez):

  • Las infecciones
  • Las duchas vaginales
  • El semen (cuyo pH oscila entre 6.9 y 7.3)
  • El exceso de moco cervical

La higiene íntima es de suma importancia, recuerda consultar con tu ginecologo de confianza y permanecer informada.

La felicidad para mi consiste en gozar de buena salud, en dormir sin miedo y despertarme sin angustia. Tu mejor capital es la salud…