Bienvenid@s nuevamente a mi blog. Espero como siempre que esta información les sea de gran utilidad, ¡Es el objetivo de este espacio! Un ultrasonido obstétrico es parte fundamental del control del embarazo hoy en día. Ya que permite ver el desarrollo del feto dentro del útero es una de las mejores herramientas en la obstetricia. También es el primer contacto con la figura de tu hijo.

Los ultrasonidos son estudios que ayudan a detectar a tiempo malformaciones o anomalías en el desarrollo del feto. Por lo tanto es la mejor manera de monitorear la salud del feto y del útero durante el embarazo. Además ayudan a diagnosticar ciertas condiciones médicas.

¿Cómo funciona?

El Ultrasonido se basa en el principio del sonar, como lo usan los murciélagos. Este es que una sonda envía ondas sonoras y recibe el eco de dichas ondas al chocar contra un objeto. Cuando las ondas rebotan en los órganos internos, los fluidos y los tejidos forman una imagen a través del eco. Además estas ondas pueden medirse para saber la distancia a la que se encuentra el objeto y determinar su forma y tamaño. Las imágenes obtenidas se transmiten instantáneamente en un monitor.

Un ultrasonido obstétrico proporciona imágenes tanto del útero como de los ovarios, incluyendo, si existe, un embrión o feto. Durante un ultrasonido obstétrico puede verse el movimiento del embrión y el latido de su corazón.

¿Para qué se usa?

• Confirmar un embarazo.
• Determinar la edad del feto.
• Diagnosticar algunas anormalidades en el feto.
• Evaluar la posición del feto y la placenta.
• Determinar si el embarazo es múltiple
• Determinar si la cantidad de líquido amniótico alrededor del bebé es adecuada.
• Revisar una apertura o reducción del cérvix.
• Evaluar el desarrollo del corazón.
• Descartar problemas en la placenta o el útero.
• Se pueden detectar malformaciones fetales.
• Evaluar el bienestar y crecimiento del feto.
• Se puede evaluar el flujo de sangre en el cordón umbilical, en el feto o en la placenta.

Clasificaciones del Ultrasonido Obstétrico

Existen dos clasificaciones de los ultrasonidos dentro de la obstetricia: el ultrasonido transvaginal y el transabdominal. Cuando se debe realizar uno u otro, dependerá de diversos factores.

Ultrasonido Transabdominal

Se realiza recostando a la paciente, se aplica un gel sobre el abdomen y pelvis permitiendo al aparato transmitir las ondas. Es aconsejable realizarlo desde las primeras 4 o 5 semanas de gestación. Con este ultrasonido se puede ver la posición en la que se encuentra el feto y sus movimientos. También en ocasiones se puede ver su sexo.

Ultrasonido Transvaginal

Este ultrasonido consiste en colocar la sonda dentro de la vagina de la paciente, logrando obtener imágenes más exactas del embarazo. Se suele utilizar en las primeras etapas si se tiene sospecha de problemas en el cérvix o los ovarios. También puede usarse para identificar un embarazo intrauterino o uno ectópico. Además se detectan anomalías que puedan presentarse en el útero o la placenta, y no son percibidas por el otro tipo.

Otras aplicaciones

La utilización de ultrasonidos no se limita solo a pacientes embarazadas, también es muy importante en consultas generales de ginecología. Esto debido a que es una herramienta útil para obtener un mejor diagnóstico de enfermedades en el cuello uterino y matriz. Además de descartar padecimientos como tumores y fibromas.

Puede también ayudar a detectar la patología del ovario poliquístico para su oportuno tratamiento. Así como detectar en los ovarios quistes y tumores que requieran de una cirugía.

¡Les recuerdo la importancia de asistir con su ginecólogo con frecuencia! Y ya que hablamos de este tema, recuerden también que en mi consulta cuento con equipo muy moderno para realizar este tipo de estudios.

Me encuentro a tus órdenes, no esperes más y haz tu cita.